"Rousseau, en su tiempo y en el nuestro", pudiera ser también el título de este libro que recoge los temas básicos de Rousseau y del racionalismo laico francés. Los ubica en su contexto histórico y, a la vez, los discute en función de su relevancia actual. Al hacerlo, recoge los aportes de la Ilustración francesa, de Diderot y Voltaire en especial. Por decirlo de alguna manera, el autor hace intervenir a tales autores en la pólemica política de hoy: los trae a nuestro tiempo, con lo cual critica a la burguesía con las armas primigenias de esa misma burguesía. En este sentido, el libro es un alegato a favor de la razón, la ciencia crítica y sus fueros. Por lo mismo, es también una dura crítica a los excesos del posmodernismo y otras variantes del irracionalismo filosófico y clerical. De singular relevancia son las críticas del autor a los hoy muy extendidos mitos del mercado. En este plano, es agudo su argumento sobre la falsedad de la ecuación mercado = libertad que propala la ideología neoliberal hoy dominante. Que la coacción del mercado sea hipócrita (i.e, es poco visible) no implica que no sea muy real, sostiene Valenzuela. En este contexto, su filo crítico también apunta a los que hoy (vg. en Chile) sostienen la visión de un posible "socialismo de mercado". Para el autor, el socialismo o está asentado en la plena libertad de los trabajadores o no es. Por lo mismo, rechaza tanto las visiones estalinianas como las de ese "socialismo de mercado", el cual no es más que una hoja de parra vulgar y nada sólida para encubrir la subordinación ideológica y política al actual orden burgués. En breve, si no se trasciende al régimen del capital, el mundo del trabajo no podrá ser libre. Es decir, ser fieles al reclamo de Rousseau por la libertad de los trabajadores nos obliga hoy a luchar por un socialismo auténtico, crítico y libertario.