¿Cuánto dolor será necesario para despertarnos?¿Cuán cerca del abismo será necesario que lleguemos antes de que comprendamos cabalmente que nuestro sistema patriarcal –con su autoritarismo disfrazado de democracia, su violencia disfrazada de buenas intenciones, su explotación, su desmedido afán de lucro, etcétera- es un navío que conviene abandonar antes del naufragio?