El presente volumen es un regalo, un don para quienes abran sus páginas y recorran la biografía poética de un cultor, de un campesino que anudó vida y “oralitura” como solo lo podían hacer esos “chilenos viejos” de los que habló Mistral, cuando dijo de ella misma que tenía “el hábito del chileno viejo” de decir lo que pensaba. Se trata este de un texto, una trama, donde convergen múltiples autorías y variadas escrituras para decir una vida que es dos en una: la del Chincolito y la de Luis Ortúzar.