¿Por qué aceptamos como normal que las corporaciones tengan derechos y puedan reclamar por ellos mientras nos resulta inconcebible que la naturaleza, de la que depende nuestra vida, goce de ese reconocimiento? Dado que superar este desatino es uno de los grandes retos de la humanidad para enfrentar el colapso ecológico y social, Alberto Acosta y Enrique Viale, referentes internacionaales del pensamiento y las luchas ecologistas, cuentan qué significan los derechos de la naturaleza y por qué el tema está muy lejos de ser una formalidad jurídica o una simple novelería.