Partiendo del hecho de que todos venimos después de alguien o algo (lo acontecido), este libro se centra en ciertas modalidades vitales desarrolladas por una generación que llegó luego o más tarde que otras, pero, a diferencia de otras, su existencia tardía entraña un componente subjetivo específico. Se trata de un conjunto de notas y conjeturas provisorias, fragmentarias y no necesariamente conectadas (o conectadas… no necesariamente) sobre los llamados millennials y el pasaje de la melancolía a la depresión que –según la hipótesis barajada– los determina en cuanto tales. Honrando el compromiso de encuentro que existe con todos aquellos que por distintos motivos fueron políticamente derrotados, se atiende a lo que insiste aún de los fracasos emancipatorios pretéritos para así entonces dar lugar a un nuevo intento, abrir el horizonte de lo posible y recuperar el futuro.