El cadáver de un indigente motiva una serie de especulaciones sobre el probable homicidio y lo que esto puede generar, lo que deviene en una serie de hechos en que se ven involucrados personajes del submundo urbano, policías, jueces y fiscales, provocando situaciones que, por absurdas, se vuelven sátira y sarcasmo de la realidad. Un crimen contado por todos sus protagonistas desde sus puntos de vista encontrados. Con matices de humor e ironía, la obra satiriza nuestra identidad como sociedad latinoamericana.