La noche trágica de los Copuyes narra la historia de un personaje real, Bautista Díaz Low. Más allá del interés histórico y testimonial de esta novela, su valor radica en la estrecha conexión del autor con la geografía de Magallanes, con la naturaleza agreste y con la psicología íntima de sus habitantes. En un lenguaje poético, enriquecido por las mezclas de idiomas y visiones de mundo, el narrador instala de lleno al lector ante la potencia del conflicto vital de su protagonista: la lucha por el arraigo, por encontrar un lugar en el espacio más adverso que sería posible imaginar y que nunca deja de asombrar por su belleza. En esta, su primera novela publicada en 1971, Enrique Wegmann pinta un cuadro perfecto de la realidad de la vida colonizadora en los canales patagónicos. “Enrique Wegmann Hansen bebe su zona, comparte el pan y el vino con los hombres que han dictado la clase magistral del existir y el consistir en la región. Extranjeros que llegaron a Magallanes con la visión de la patria en las pupilas, y que traían en su pecho agitado el latido del héroe, y el deseo de ver crecido el terreno de angustia que acariciaban. Tragedia, drama y poesía fueron el paso, el andar de estos hombres por el paisaje de tiranía y de libertad que Chile les ofrecía. El hábitat y el habitante se comprendieron. Y así, este medio se volvió posada y cántaro; ruta y consejo.