«Yo no soy un hombre, soy dinamita». Así es como se define Friedrich Nietzsche en Ecce homo. Nietzsche el provocador, el polemista, el irreverente, el rotundo, el loco. Nietzsche el explosivo, el rey del pensamiento que revoluciona la filosofía y atraviesa los siglos: tras él llegan sus herederos, filósofos y filósofas que se cobijan bajo su alargada sombra y se iluminan con sus luces. Como Gilles Deleuze, Michel Foucault, Roland Barthes, Sarah Kofman o Judith Butler