La presente compilación reúne a trece mujeres que han empuñado la pluma, o la tecla, para poner sobre la mesa sus cuentos criminales y dejar en evidencia la exploración en el género que vienen haciendo, de manera cada vez más amplia y diversa, las escritoras en Chile.
El compilador de este conjunto señala que esta muestra “no tiene un carácter antológico ni pretende ser una recopilación exhaustiva de las autoras chilenas que han creado textos policiacos o criminales”, sino más bien se trata de una punta de iceberg, o de “una primera fotografía al estado de la narrativa criminal escrita por autoras chilenas”. Es decir, esta sería una pista para explorar no solo una producción en potencia de estas o nuevas autoras, o de un quehacer que se mantendría latente en una circulación alejada de una luz que la haga visible a otros ojos.
Por lo tanto, este volumen vendría a ser una pista de esta trama, una aproximación a distintas expresiones del cuento negro y policial en Chile, escritos con M de mujer.
“Algunos cuentos responden a formas más clásicas y otros transitan por sendas innovadoras. Pero más allá de las diferencias, todos los cuentos compilados entregan historias que interesan desde sus primeras líneas y seguramente sabrán captar la atención de quienes decidan leer sus atractivas propuestas.”, señala Eterovic.