Dos para uno, uno para dos en el teatro y en la vida. Palabras y gestos que se confunden en la escena con el hálito de lo cotidiano.
Dos contra viento y marea, atravesando tiempos y espacios. Siempre con la misma sonrisa y la misma pasión, surcando fatigas, indiferencias, aplausos, articulando el vivir con el oficio.
Nadie mejor que Sieveking para relatar en este libro, esta simbiosis, este milagro, este amarre del amor con el escenario desde su prístina memoria.